viernes, 31 de agosto de 2012

Dun día da lúa


Non me parece xusto. Eu tiña un corazón roto que facía delicias co son dos seus latexos, cada parte co seu ritmo, e non pedira en ningún momento que naide viñera a tentar facer con el algún reparo. E entón.. foi que ti viñeche, e que todo empezou a trocar de súpeto...

Non quería, nin interese que tiña eu en que supuxeras tí cura algunha dos meus males... nin tan sequera esperaba o que fuches, facendo de aquel lúns un día na lúa... pero que te converteses en algo que realmente tivo sentido non era algo que fose eu buscando, e aínda asi sucedeu.

Chegache o cuarto privado onde eu habito o meu corpo e ata cambiache os seus mobles, e iso, lonxe de me amolar, como eu supoñía dada a personalidade que profeso; estábame a gustar. E rifabamos... vaía se rifabamos... pero en tódalas nosas rifas acababamos tendo agasallo. Iso era o que máis me gustaba.

Na miña intención non estaba, pero có paso do tempo, e con distancia de por medio, fúchesme cosendo os rotos do meu enfeble corazón adoecido. Non me din conta ata que xa era tarde de máis, e compartindo contigo o dor da cicatriz foi cando decidiches o que agora máis lamento. Foi cando decidiches que se estabas a curar o meu corazón eu non tiña máis motivos para sentirte que ese.

Pero e que eu non te pedira nada diso. Nin te esperei, nin te busqueí, nin cría na túa existencia... simplemente apareciches... tan só nos atopamos, naquel día da lúa, e quedei prendado dos vosos embruxos, teu e da tua complice meiga das mareas.

E agora, cun corazón a medio curar, que xa non soa pra acompáñalos meus azuis, nin a miña ánima, nin o meu jazz... agora marchas e quedo sen ritmo... quedo sen són... e non me parece xusto.

Co ben que soaban os meus latexos, e sen que eu pidira axuda a ninguén, tiveche que deixar o reparo a medias... a lo menos podialo deixar como estaba... pero todo coma sempre acabou por trocar do que era.


miércoles, 29 de agosto de 2012

Ado desespera(nz)


– ¡¡¡Dioses!!!

– ¿Qué pasa?

– ¡¡Me arrancan los dedos del pie con su capricho divino!!

– ¿Pero que ocurre?

– ¡Nada, eso es lo que ocurre! ¡Seguimos igual y aquí no da cambiado nada!

– Tranquilizate Ado, amigo mio.

– ¡¡¿¿Cómo voy a tranquilizarme??!! ¡Si vivimos donde no se puede confiar
en nada
y no hay nada ya que lo cambie!

– ¿A que te refieres, compadre?

– ¡¡¡A todo!!!
Somos esclavos de la mentira, siervos de la falsedad
por no decir la verdad, hasta a nosotros mismos mentimos.
Y aquí nada cambia ni en siglos.

– Oh.. don Ado, el tiempo no pasa en cálculos, sino en actos.

– Pues estos son espectáculos que no los produce el teatro.
Vivimos en un engaño que creemos desengañado y lo llamamos igualitario.
democracia es hacer que el pueblo se crea que manda.
Igualdad, que a todos nos mientan en igual medida.

– Cada día llevas peor lo que ocurre al rededor, tranquilo
que todo lo que sucede, sucede una vez sucedido
y nada cambiará que te quejes.

– Menos cambia que te dejes, o que alejes la mirada
como si nada ocurriera, que te fijes solo en todo
lo que tienes tu tan cerca: lo pequeño
la vida más que sueño es pesadilla,
y el sueño es sueño.

– Pero el motivo de que esto ocurra es que todos buscan lo grande.
normal que lo normal aburra, pero lo pequeño...
no lo entiendo aunque ponga mi en ello empeño,
si aprendieran a apreciar lo distinto, que, por tal, es bueno...

Pero siempre habría quienes no lo supieran ver.

Y a eses... ¿qué les pretendes hacer?

– No sé y eso ya lo veremos...

–¡Lo veremos cuando se haya de ver! ¡Buenas noches!

– Ojalá se hubiera visto ayer... ¡Qué usted las pase!

martes, 28 de agosto de 2012

Ado a Esperanz



No nos estamos entendiendo del todo.

Tienes razón, también yo lo creo.

Lo que quiero decir es que falla algo, el lenguaje, el canal…

–…O el receptor. No cabe duda.

Quizás sea el mensaje, que no caló lo bastante hondo.

No lo creo, a los dos, tu y yo, nos parece obvio siendo ambos bien diferentes.

–Pues explíquele usted a mi mente, el por qué del qué y el cómo.

–No veo por donde empezar.

–Pues empezaré yo ahora en tu ayuda:
en este mundo material (¡qué con su escombro se sacuda!)
los menos saben actuar, y la mayor parte se la... resbala.

–Variopinta se encuentra la gente.

–Y como si esto fuera poco en este mundo de cristal
el asfalto baña todo en su totalidad total.
Sin saber a donde vamos, hacemos caminos de azar
por si queremos marcharnos...

–Caramba! Mi buen don Ado, despertádose ha tan osado
que no le he reconocido.

–Estoy despierto, pero cansado
de este pueblo adormecido.

–Yo ya hasta me habré acostumbrado.

–En lo pequeño estáis tan perdido que lo grande se os ha ya olvidado.
Pero mi buen amigo Esperanz, si es hermoso lo pequeño,
pero cuanto destroza lo pequeño a todo lo más poderoso.
Y nosotros que pequeños, nos creemos todos diosos
y nos empiezo a encontrar tediosos. Somos dioses de la ignorancia.

–Que gran verdad has mostrado:
si algo nos diferencia del animal es no saber.
Ni actuar, ni elegir,
ni escuchar, ni aprender...
nada se nos da ya bien, tan sólo mezclar conceptos al azar.

–¿Para crear sonetos? ¿Para hablar...
de lo bueno que tiene la vida? ¿de filosofía, metafísica o retórica?
¿Sabe lo que le digo? Los animales no creen en Dioses pero los tienen
y a nosotros nos han abandonado los que creamos.


–Por qué mete a los dioses en esto?

–Quisimos inventar un cielo de guía, pues no nos llegaron las estrellas
hicimos de dioses uno solo, por el bien de la moral
pero no era más que el mal puesto en un distinto rostro
y ahora que Nietzsche lo mostró como el verdadero monstruo
recogimos su papel y son villanas las doncellas.
Poco bueno queda en todo esto don Esperanz.

–Poco y pequeño, don Ado... poco y pequeño.

lunes, 27 de agosto de 2012

El diálogo de Seado y Sea


-Creo que te mereces algo mejor de lo que encuentras... Vale que hoy en día, ni los feos son tan buenos ni los guapos son mejores... en verdad, casi lo mejor es que te quedes como estás...
-¿Y, qué hay de ti?
-¿Yo?, ya tengo más de lo que me merezco
-Pero... ¿y si me enamoro?
-Puedes, y hasta puede que te corresponda, pero por amor no se entiende lo mismo dos veces.
-¡Es eso qué tu no amas!
-Qué amo de muchas formas y quizás en demasiadas ocasiones, mas siempre aviso de que no es conveniente amarme.
-Pero quizá puedas transformarme y eso me pueda bastar.
-Me sorprendería.
-¿No me crees capaz de hacerlo?
-¿El qué?
-Amarte por sorpresa.
-Sabes que la respuesta es sí, y hasta que me sorprendería amándote; pero no te condenaría a mi desorden.
-¡Muy considerado por tu parte, pero creo que soy libre de elegir mis condenas!
-Yo sólo lo advertía... Me duele el aire que te aparta y la cabeza...
-Para la cabeza no tengo cura, pero...
-¿Qué haces tan cerca?
-Arreglar tus dolores y mis defectos.
-¿Defectos? ¿Tú? Lo dudo...
-Según tú... no escojo bien mi compañía.
-Ahora estás conmigo. ¿No?
-¡Pues claro!
-¡Entonces cúrame!(...) ¿Puedo explotar?
-¡Hazlo!
-¡No sin llevarte!
-¡¡Hazlo!!
-¡¡¡BOOM!!!

domingo, 19 de agosto de 2012

Resurgir...

Resurgir,
de la profundidad de un fondo, a su superficie;
de los órganos del nombre, a su piel;
de este nombre que me da significado, a su esencia.

Tras haber estado dentro del interior manifiesto de mi loca existencia, salgo y resurjo, rugiendo cual león en jaula. Me he librado del encierro para sentir los yugos que sostienen mis cadenas. Como salir de una celda para entrar en prisión. O en patíbulo, donde mi libertad se ve en los pájaros que veo, pero que no siento.

Resentido surjo con surcos que se inflaman de infección, arañazos de los alambres de espinos, de engaños de un sistema vírico y contagioso.

Pero hay que rugir por resurgir y enseñar, también, los dientes... los dientes, afilados por la insurrección y el ansia de liberación.

lunes, 13 de agosto de 2012

El día que lo entendí todo.


Si estaba yo tan perdido ¿cómo he podido encontrarte?
Si me había desviado hasta de mi propia decisión ¿cómo es que estabas tú allí?
Si ni siquiera tenía un destino ¿cómo te has convertido en mi meta?

Y me encontré al encontrarte y encontrar en ti lo que no estaba buscando siquiera, un día inhóspito e inesperado, en el que nada parecía que fuera a llegar a ser lo que acabó al final sí siendo. Apareciste como una aparición en el lugar donde tenía que estar yo sin haberlo decidido. Fue el viento quien me llevo hasta allí y que trajo hasta mi la voz que irrumpió rompiendo carámbanos y témpanos de hielo, acariciando mis tímpanos sin miedo. Sólo pude dejarme llevar y nos llevamos llevados por lluvia, tan solo imaginada, a algún callejón sin salida.

Allí fue donde, por vez primera, me quisiste echar de tu vida, y nunca me habían echado con tal recibimiento que me acogía con sin-quereres que se aferraron a mi entender. Y no entendí otra cosa que lo que me llevó a agarrarme a ti.

Desde entonces lo entiendo todo.

En esta vida de teorías impera el caos en sus jugadas y sé que fue cuando me envolvió ese caos, cuando me perdí, cuando no decidí no hacer lo que no decidí que haría, cuando no me quedó una pizca de destino ni en el fondo del zapato; fue entonces cuando te encontré, cuando estuviste allí, cuando te convertiste en mi meta.

Y ahora, que todo esto ha pasado,
sólo puedo encontrarte, allí, en mi meta.

sábado, 4 de agosto de 2012

un NO


NECESITO UNA LLAVE QUE YA TENGO
PARA UNA PUERTA ABIERTA QUE NO EXISTE
UN TE EXTRAÑO QUE YA NO PRACTICO
UN TE QUIERO PERO YO NO FUI
EL MARFIL DE UN DIENTE DE PIANO
UN NO SÉ QUE DECIRTE SI NO ESTÁS.
NECESITO UN PORTATE BIEN, MALO
UN NO GANAS DE NO VERTE NO TEMBLAR
Y ESE DEJATE HACER QUE YA VERÁS.

QUIERO UNO DE ESOS BESOS QUE YA HE DADO
UN COMPORTATE COMO EL HOMBRE QUE AUN NO ERES
OTRO NIÑO DEJA YA DE DAR LA LATA
Y AQUEL SIENTO QUE NO TE HAYA VISTO AYER.
REQUIERO DE UN MEDIODIA O DE UN RECUERDO
INGRATO, QUE ME CUESTE UN HICE VER
UN ASIENTO DESCOLCHADO Y UN CRUCIGRAMA
EN el QUE TODAS LAS RESPUESTAS SEAN PODER
PODER ESTAR, PODER SER, PODER SIN GANAS.

NECESITO ABIERTAS TODAS LAS VENTANAS
QUE SE HAGA UN TORBELLINO EN MI AZOTEA
QUE DESTROCE MI TEJADO DESDE DENTRO
LAS CORRIENTES DE ELECTRICIDAD QUE EMANA
CADA PARTE DE ESTE ROCE QUE HACE EL TIEMPO.
QUE SE PARE TODO QUIETO POR UN RATÓN
QUE NO HA LLEGADO AÚN A SU RATONERA
UNA VIDA AUN NO EMPEZADA, UNA MUERTE NUNCA VISTA
Y UNA SÓLA CORDENADA PARA NO ENCONTRAR SI QUIERA.

ESPERO UN NADA, UN PAR DE ALGOS Y MUcHOS TODOS
UN TROZO DE PARTE DE UN CACHO DE PIZCA
AQUELLAS CASCARAS DE PIPA QUE ESCUPIÓ UN SABIO
Y LOS ESCAPARATES DE ALMAS QUE ME PERTENEZCAN.
NECESITO VER LO QUE SABEN LAS PIEDRAS
Y TODO LO QUE EL POLVO VA A ENSEÑARME
UNA CONVERSACIÓN CON MIS BACTERIAS
Y FOLLAR CON LAS ESTRELLAS POR QUEMARME.
pero TÚ sacias mis todos con un NO.

miércoles, 1 de agosto de 2012

No puedo soportarlo


No puedo soportarlo,
tener a tanta gente que quiero tanto
tan tan lejos,
que aquel espacio que ocupo me limite,
que no pueda estar dos veces en
un instante, una estancia, un estado;
no poder ver un reflejo estando oscuro,
ni ver el movimiento cuando ocurre, sino
cuando ya hace un tiempo que ha pasado...
tiempo...
que parece necesario para verlo
al suceso, al hecho, al acto,
a todo lo que pasa alrededor
por no poder vivir y revivir
a un tiempo...

No quiero soportarlo,
ver una mirada soltera de sonrisa,
no puedo soportarlo,
y me mata
no poder saborear en la distancia
aquello que ha pasado por mi boca
ni oler lo que olí, ni sentir lo que sentí;
que no pueda ser visto lo que pudo haber sido...
pero no.
No soporto nada de eso, ni tampoco:
ni las mentiras que te cuentan por verdades,
ni las verdades que te cuentan por mentira;
no me pasa así pues con las restantes
y es que no soporto lo indiferente
ni la indiferencia.

No aguanto, ni puedo, ni quiero hacerlo
a todos aquellos que sufren de miedo
ni a aquellos desvergonzados
que sienten la verguenza ajena
y no la propia,
y menos que sean ellos y no otros
los que pongan las reglas de este juego...
ni al tiempo...
invento de estos pocos locos dueños
¡de todo
menos de los sueños que sí tengo!
de las vidas que comparto
hoy que es nuestro, sólo, lo de todos
que lo tuyo no te pertenece, si es concreto
y lo correcto es lo que menos se le parece al respeto.

Pero sí soporto al bueno,
al que disfruta de los juegos del tiempo
y de sus jugos
sin dejarle a este que impere
a quien de todo se enamore, al que se adhiere
a las heridas del que tiene al lado
y prefiere ser quien las porte.
No al que mata.
Sí al que muere por vivir,
al que tiene lo que quiere por querer lo que recibe,
a la mujer y al hombre libres.
Nunca al que se deja pensar y siempre
al que piensa diferente cada día.

Quiero al puro sentimiento que consigo en los demás
y, a veces, intento querer al tiempo, sin lograrlo.